El sonido de los recuerdos de nuestra vida

Todo surge en el verano de 2014 cuando, en uno de eso momentos que te cambian la vida, decidimos dejarlo todo y comenzar un viaje alrededor del mundo. Tras años trabajando en el sector de la acústica, ese viaje cambió nuestras vidas en todos los sentidos. Tras muchas y diversas experiencias, nos dimos cuenta de la necesidad de generar nuevos materiales acústicos que aunasen el diseño más exclusivo, con el máximo confort acústico. Todo ello sabiendo que queríamos que fuese asequible a todos los bolsillos, para que el acceso a materiales y diseño tan exclusivos no fuera solo para unos pocos. Así fue el nacimiento de ECOcero, un sueño muy ambicioso que se materializó en la empresa que somos hoy en día.

El efecto mariposa

Aquella experiencia desencadenó algo que no sabíamos a dónde nos llevaría. Comenzamos desde abajo, en un pequeñísimo local, el más económico de todo Alicante. Y poco a poco todo fue cambiando y evolucionando. Pasamos de trabajar en un local de 90m2 a tener unas instalaciones de más de 4000m2, pasamos de ser 2 personas a las más de las 30 que somos actualmente. Pasamos de tener que subcontratar gran parte del proceso productivo a tener en nuestra empresa grandes especialistas en cada materia y, sobre todo, pasamos de ser una pareja emprendedora con muchas ilusiones, a ser una gran familia empresarial con enormes esperanzas compartidas.

Movimiento es vida

Una de las claves del éxito de ECOcero ha sido, la confianza en nuestras convicciones. Desde el principio hemos tenido claro, que queremos dejar un mundo un poquito mejor detrás de nosotros. Por ello hemos desarrollado todo tipo de productos y diseños ecológicos, toda nuestra empresa es totalmente respetuosa con el medio ambiente y poco a poco vamos desarrollando proyectos sociales para ayudar a aquellas personas que lo necesitan. Creemos que la empresa debe formar parte proactiva del tejido social y en ello estamos, creando una empresa para el futuro, moderna y comprometida.